sábado, 29 de mayo de 2010

LOLA EN EL MÉDICO

-Buenos días, Doctor. ¿Nos podía atender un momentito? Es que es algo urgente. Mire usted qué lástima, qué pena, qué destrozo traigo de amiga.

-Tal como veo a su amiga no se va a agravar porque yo termine de comerme el bocata de salchichón y la cervecita. Esperen en la puerta de la consulta.

-En horas de trabajo, el alcohol es malo, Doctor, y el colesterol que se va a meter para el cuerpo, fatal para las arterias y el corazón, oiga usted.

-Tranquila, Lola. Déjame hablar a mí que aún coordino, poco, pero… Doctorcito, ¿pero no ve lo fatal que está mi amiga?

-Mari Pili desengáñate, el doctorcito sólo ve el bocata… ¿Me da un mordisco si le quito a esta pelmaza?

-Lola estás muy mal y sólo piensas en comer…

-Mari Pili, tú porque eres la dama de la media almendra. Límpiate las gafas y mira qué bocata se está comiendo, si es que chorrea grasa… ¿Está rico, doctor?

-Muy rico, señora. Ahora si me disculpan…

-De disculpar nada. Mi amiga…, por cierto Doctor, se llama Dolores. No la duele nada según ella, así que llámela Lola…

-Señora, coño, que vaya a la consulta y saque número que ahora voy.

-Mari Pili, igualito que en la cola del pescado. Vamos este tío en vez de regentar un doctorado, ha puesto un chiringuito de aspirinas.

-Señora un respeto. Es mi tiempo libre.

-Un doctorcito no tiene tiempo libre. Lo primero son sus enfermos. Para mi Pepe son sus muertos. Para mí, son mis cabras, mis vacas, mis gallinas.

-Me alegro mucho, pero para mí en este momento es mi bocadillo de salchichón… Por cierto, ¿usted no criará cerdos?

-También, doctor y de los de raza negra. Ya sabe, morenitos comiendo bellota.

-¿Vende jamones usted?

-Pues… ¿Mari Pili sabes si se venden jamones en la granja?

-¿Ve Doctor? Está fatal Lola. Se cree que tiene una granja.

-Ah… ¿Y no la tiene?

-Noooooooo, Doctorcito, no tiene. Es un juego que la envenenado el cerebro.

-Doctor, Doctor, ¿qué me pasa?

-A simple vista, señora. Usted está trastornada.

-No se engañe, Doctor, ella, de siempre, ha tenido una jaula de grillos en el cerebro.

-Pues está claro que ahora tiene una plantación… ¡camarero!, Otra cañita, por favor.

-Que no siga bebiendo que no va a poder diagnosticar a mi amiga.

-A ver…, un momento que doy otro mordisco al bocadillo… ¿Qué síntomas tiene, señora?

-Me meto en la cama y me vienen a buscar las cabras, las vacas…, ya sabe, para que las ordeñe.

-Ahhh… Está clarísimo.

-¿Sí? ¿Qué la pasa, Doctor?

-Más claro agua, señora. Su amiga está como una cabra.

-Ya, eso de siempre, ¿pero cómo de cabra? ¿Mucha, mucha cabra?

-Rematada. Ahora si me permiten, he de volver a mi jornada laboral.

-Le acompañamos y que mi amiga se siente en el diván y la escucha… Por cierto, ¿por qué va con casco y extintor, doctor?

-Mayormente porque soy bombero, no médico, señoras… Un placer y buenos días.


-Mari Pili, vamos horita mismo a que te gradúen la vista…

martes, 25 de mayo de 2010

LOLA, EXCELENTE COMERCIAL

- Buenas tenga usted. ¿Doña Mari Pili Fernández favor?

-¿Qué quieres Lola?

-Buenos días Doña Fernández, soy Dolores García de TutoBank... El motivo de mi llamada es...

-Corta el rollo, Lola, que estoy guisando unas ancas de rana para mi Paquito.

-Disculpe Doña Fernández. Tengo el placer de poderla ofrecer ancas de rana al por mayor. Se las guisamos también.

-Lola, por dios, cómo han sido tan insensatos de volverte a readmitir en TutoBank. Eso es cualquier cosa menos un banco. Qué lastima, qué pena, qué destrozo

-Doña usted no me puedo salir del guión porque me echan si no, ya la contestaría como se merece. Además esto no es un banco, somos la boutique del inversor más avispado.

-Bueno, ¿para qué me llamas?

-Necesitaba oír tu voz, Doña Fernández.

-Pues yo estaba tan a gusto sin oír la tuya... Lola, ¿no te gustaré, verdad? Ya sabes, tú me entiendes...

-Lo sé y te entiendo, pero no estoy tan desesperada, lo único es que tengo que hacer un número de llamadas... Hoy en promoción tenemos bisoñés en color fosfato. Medias elásticas con tirabuzones para sujetar muslos pequeños...

-Repite Lola, por favor...

-¿Cuál de las sandeces que vendemos?

-Loooola, que las llamadas se graban.

-Ay, madre, es verdad. Espera que recompongo el guión... Doña Usted, de nuestras magníficas promociones, le obsequiamos sin sorteos ni llamadas un viaje.

-¿Un viaje? ¿Qué he de comprar, Lola?

-Compra las medias con tirabuzones es lo menos malo...

-Loooola, la lengua.

-Ayyyy, leñe, es que no la domino. Mi lengua no tiene dueño. Bueno Doña como se llame, la pongo ¿Cien pares? Es lo mínimo que despachan

-¿Cieeeeen pares? Si sólo tengo dos piernas, Lola

-¿Y quién no la dice a usted que de hoy para mañana no la crecen más? Ya ve, hace dos días, no había amapolas en el campo y ahora está plagadito. ¿Y por qué? Porque es primavera en TutoBank, Doña Saga de los Fernández.

-Vale, mándame cien... Ah y el viaje, claro. ¿Adónde es, por cierto, Lola? Ah, ¿Cuánto cuesta?

-A dónde quiera, Doña Clienta. Y cuesta doscientos.

-¿Doscientos qué, reales, euros, dólares, yenes? ¿Cuántas personas pueden ir?

-Doscientos lo que sea, trabajamos todas las monedas. Y de viajar, Usted, Doña Mari Pili. No más.

-Lola te da igual ocho que ochenta. Doscientos y no sabes si son millones o qué. ¿Y qué hago en Moscú yo sola, Lola? Haz trampa y sácame un pasaje para Paquito.

-No puedo, Doña. Compre ciento cincuenta fiambreras y hago un poder. Y no sé si son doscientos millones o dos mil, estoy muy cansada.

-¿Ciento cincuenta? Si no tengo armarios, Lola.

-La rebajo dos y cerramos el trato, Doña Pilarica. Ciento cuarenta y ocho fiambreras y un viaje.

-Vale, Lola. ¿Pero qué meto en tanta fiambrera?

-Cien medias con tirabuzones y la sobran cuarenta y ocho para regalar en reyes y fechas señaladas... Ojo, ni se te ocurra regalarme ni una fiambrera. Son más malas que un dolor de muelas...

-Jó, Lola, cuánta mierda he de comprar para tener unas vacaciones gratis. ¿Qué día hemos de estar en el aeropuerto?

- Dirá en la parada de autobús, Doña Fernández. Es un viaje de ida, que no de vuelta, a cualquier parte de su ciudad natal, es decir donde vive actualmente, Doñita. ¿A qué es fantástico? Es que verá usted, ya esos viajes de ir a París, Roma..., se han pasado de moda, ahora se lleva el turismo interno... ¿Fernández? Oiga... Me ha colgado. No lo entiendo, cada día es más rara esta chica.

sábado, 22 de mayo de 2010

LOLA Y MARI PILI EN LOS TOROS

-Lola, ¿tú crees que vamos propias?

-¿Tú y yo, Mari Pili? Hasta con rulos en la cabeza estamos divinas de la muerte. Antes muertas que sencillas

-Ya… Es que todo el mundo viene sencillo de verdad, en vaqueros y esas cosas, Lola. No tengo un hueco en mi cuerpo entre la peineta, la mantilla, el abanico, el cesto con las gallinas, la tartera, la nevera colgada al cuello… No sé, temo desentonar, que la gente me mire. Claro que tú, ¡Jesús, María y José! Pareces la maja de Botero…

-¿Y, Mari Pili? Si la gente quiere ir hecha un cromo, no tengo porque yo ir hecha un pegamento… ¿Bailamos?

-Lola, por dios, estamos en una plaza de toros…

-Anda ésta, ¿y para qué crees que tocan los pasodobles? Los toros no bailan, pero tú mi arma, que se vea cómo se mueven esos muslitos de pollo que para eso vas a clase de baile jamaicano…

-Señora siéntense que va a salir el toro…

-Un poquito de por favor, caballero, mi amiga Mari Pili necesita expresarse. Los toreros la ponen…

-Lola, ¿desde cuándo un torero me pone?

-Mari Pili es lo lógico. En cambio a mí me pone un toro…. Mira, mira, ahí está. Qué estampa, madre del carnero, es igualito que yo de perfil. Mira, Mari Pili, el torito tiene mi misma papada. Anda que si soy descendiente de un toro…

-Señora cállese… Usted de donde desciende es de las vacas.

-Caballero, un poquito de por favor, cómo me voy a callar si acabo de ver a un familiar mío en medio de la plaza… Ay, Ay, Mari Pili, ¿pero por qué el del traje amarillo con moño en la nuca quiere pegar al toro… ¡Majadero como pegues al toro te escupo!

-Lola cállate. Esto es una corrida de toros.

-Como si es un corrimiento de tierras silvestres, Mari Pili, como se metan con el toro, me tiro a la arana y se enteran quién es Lola García, de la saga de los Osborne de toda la vida.

-¿Desde cuándo eres tú de los Osborne, Lola?

-Mari Pili desde que he visto al toro. Es igual que yo, no hay más que verlo. A mí me faltan los cuernos, pero por lo demás, exactos… Bueno soy la rama femenina y venida a menos de los Osborne. ¿Saco la tortilla? Traigo una ristra chorizos de mi tía Lolita…

-Señora déme un cacho…

-Y un asta de toro, le doy también, caballero. Después de que no me deja hablar, me impide bailar, me tiene aquí constreñida, estreñida… Mari Pili, Mari Pili, tira al toro una gallina.

-Las gallinas son para el torero que toree bien, no para el toro.

-Y un rabo de toro, Mari Pili. Una de las gallinas, la más gorda, es para mi familiar, el señor toro… Mari Pili, mari Pili, ¿pero qué haces?

-Ay, Lola, que se me han escapado las gallinas.

-Quieta ahí, voy yo. El toro no te conoce…

-¿A ti sí, Lola?

-Señora, ¿dónde va?

-Voy donde me da la gana, caballero. No ve que el torero se va a quedar con mis gallinas…

-Lola, Lola, que el toro no te conoce. Ven para acá… Looooola… Ay Dios mío, ¿pero por qué me has tenido que dar una amiga tan peripatética?... Señor guardia, por favor, ¿la enfermería?

lunes, 17 de mayo de 2010

LOLA HOMICIDA

Ay, creo que he matado a mi Pepe por confusión. Estaba pensando en el presidente del gobierno y se me ha ido la mano… Ha dejado de hacer ruido, tan niquelado, tan quietecito. Mirad el bigote, todos los pelos peinados… Esperaré un poquito antes de llamar a la policía por si resucita, ¿no os parece? El caso es que no sé por qué he de llamarles; le entierro y santas pascuas, ¿no? Me ahorro burocracia… aunque una vez me dijo:
-Lola, si me muero, no me entierres.
-Como quieras, Pepe. ¿Te momifico y te pongo en un expositor?
-Te hablo en serio, Lola. Me incineráis.
-¿Cuánto cuesta quemarte, Pepe?
-Tengo un seguro hecho, tranquila, no tendrás que pagar nada –mi Pepe tan previsor y ameno para todo…
-Y luego… ¿qué hago con tus polvos?
-Se dice cenizas, Lola, y se meten en una vasija y se las entregan a los familiares y, estos, las esparcen por un lugar significativo para el difunto, ¿me entiendes?
-Ay, Pepe, no estoy dispuesta a esparcir tus polvos por la casa, se me pondría perdida de suciedad. Además, Pepe Perro tiene alergia al polvo. ¿Te coloco encima de la chimenea de adorno o, en la estantería para que me veas ir y venir? Dime…
-Lola, haz lo que te dé la gana.
-Vale, te meteré en el altillo.

… No entiendo por qué ha tenido que morirse justo ahora que España se ha hundido… No fue para tanto y, encima, ¿qué hago ahora con la hipoteca? Menudo lío… Anda que cómo me acusen de asesina… Bueno, digo que fue homicidio involuntario, que realmente quería matar era al presidente de gobierno, total, a ése le quiere matar todo el mundo mundial. Lo maté en defensa propia, pero claro, iré igualmente a la cárcel… Yo no tuve la culpa; tenía deshechos los nervios por sus ronquidos y… le di un golpecito de nada; se cayó instantáneo… Ay, podía revivir… Me siento fatal, ¿serán los síntomas de la viudedad? Podía haber asesinado al presidente de gobierno, él sí que me ha dado motivos, pero a este pobre hombre trabajador y tan calvo... Mi Pepe era tan, tan bueno, qué buen carácter tenía, qué bien le sentaba la calva, qué cuerpazo tenía tan redondito… Pero, ¿a quién se le ocurre matar a un marido? “A ti, Lola, a ti”… Ay, Dios, que estoy oyendo voces, ay, que esta vez va en serio, que me estoy trastornando… Voy a velar un poco el cadáver…
“Ay, Pepe, te moriste justo en el momento en que te iba a decir que jamás volvería al mercadillo; sabía que te haría feliz mi decisión y te has ido al otro barrio sin saberlo, ay, qué, lastima, qué pena, qué destrozo…”
-Lola, ¿qué haces ahí de rodillas?
-¡Jesús!, qué susto me has dado. Ay, Pepe, júrame que nunca te vas a morir, júramelo, al menos hasta que paguemos los estudios de los chicos y la hipoteca y el coche y el préstamo y… Luego te mueres cuando te dé la gana… Ah, nada de morirte hasta que no se supere la crisis hispánica, eh.
-Te lo juro, Lola, y ahora ¿seguimos durmiendo?
-Sí, Pepe, lo que tu digas… lo que tú digas, además, he de madrugar, Mari Pili me espera temprano para ir al mercadillo… Por cierto, Pepe, no ronques.

domingo, 16 de mayo de 2010

LOLA, GUIONISTA DE SOBRES DE SOPA PARA GOBIERNOS AHOGADOS

-¿Julito? Ay qué preocupación, señor, creí que te había dado un retortijón y te habías colado por la taza del IVA… ¿Dónde estabas?

-En Madrid, de firmar el contrato.

-¿Qué contrato, Julito? ¿Por qué no me informas?

-Me han contratado como actor, Lola, estoy que me salgo.

-¿Actor? Ay Jesús que esta criatura se volvió poseída…

-… Yo y Mari Pili…

-¿Y yo?

-No eres una Fernández, Lola…

-Pero sí una García. ¿O es que en los equipos no hay gente de distintas nacionalidades? Ya ves Messi… Yo como él… Mari Pili, ¿así pagas a tu amiga? ¿A que me monto una película yo sola como protagonista?

-Lola, no encajas en el guión.

-¿De qué va?

-De zombis, Lola

-Tienes razón, Mari Pili, yo soy más para una película de extraterrestres… Julito prepárame un guión.

-Mi primo no se gasta en nimiedades, Lola. Escríbetelo tú.

-Mari Pili sabes que con mi cultura de sobres de sopa la escritura no se me da.

-Pues aprendes a escribir, Lola.

-Qué soberbia tienes, Mari Pili. Te ofrecen un papel de zombi y ya crees que te vas a Hollywood con Antonio Banderas.

-Lola yo te hubiera recomendado, pero Mari Pili dijo…

-¿Qué dijo, Julito?

-Pues dije, Lola, la verdad. Ocuparías toda la pantalla y a nosotros no se nos vería.

-Me podía haber puesto la faja de neopreno para que me comprimiera… Egoí iiiiiiitas…

-Lola yo te quiero.

-Eres un pelota Julito. Te arrepentirás, te lo juro por Messi, me volveré la pichichi de la liga de guiones de sobres de sopa… Me quedarán unos diálogos niquelados. Voy a empezar…

-¿Te ayudo, Lola?

-No, Julito, vete con tu prima.

-Vámonos, Julito nos esperan en maquillaje.

-Pero qué os van a maquillar, desgraciados si ya estáis de natural como espectros mutantes en un mar de sopa… Ay que me viene… Ay…

-¿Qué te pasa, Lola?

-Una contracción, Mari Pili. Coge el papel y el boli y escribe…

-¿Qué escribo Lola?

-Te dicto Mari Pili… “Él se acercó sin hacer ruido a la cazuela. El agua hacía plof plof y…

-¿Y qué, Lola?

-Hija espera, se me ha cortado la contracción. Te crees que parir un guión de sopa es fácil… Ya, ya, que me viene de nuevo…

-Empuja, Lola, respira, empuja, comprime, espira…

-Julito, ¿tú eres gilipollas o qué?

-Lola estamos asistiendo a un parto.

-Sí, un parto de sopa, no te fastidia. Pero no puedo hacer todo a la vez, Julito, me amontono…

-Julito, primo, Lola es lenta… Tú tranquila, Lola, cuando te venga nos mandas un telegrama. Vamos Julito…

-¿Dónde vais? En el momento más importante de mi carrera mis amigos me abandonan. Qué lástima, qué pena, qué destrozo… Seguiré sola… “Despacio él suspiro mientas los fideos, uno a uno, eran engullidos por el plof plof del agua. Ellos, los fideos, se ahogaron…” Lola, soberbio, magistral. Llévaselo ahora mismo al presidente del gobierno.

jueves, 13 de mayo de 2010

LOLA COLABORACIONISTA

-Este chico me está alterando hasta el nervio de los pies planos... Juliiiiiiiiiiiiiito, coño...

-...Lola...

-Julito no me pongas esa cara pasmau que se me corta el café... Se puede saber qué son estos papeles...

-Lo que me ha dado mi prima Mari Pili, Lola...

-Julito, eres un chivato..., que lo sepas.

-Mari Pili desembucha... Dime mi querida amiga qué son estas facturas impresas en papel higiénico...

-No tenía papel de impresora, Lola.

-¿Julito, cuándo has ido tú a Jerez?

-Yo no, claro, pero mi prima Mari Pili sí, es muy viajada. También hay una factura de cuando fue a Buenos Aires de tanguera.

-Lola... te lo puedo explicar Lola, los Fernández somos una piña.

-Mari Pili la tanguera... Qué lástima, que pena, qué destrozo. Mari Pili, además de tanguista, de qué vas...

-A pedir una subvención para mi primo Julito, Lola.

-Ya, Mari Pili, y me puedes indicar si eres tan amable qué hace mi DNI falsificado entre el papel higiénico de tus facturas.

-Julito no tiene DNI, Lola...

-No tengo, Lola, no tengo, no soy marca registrada.

-¿Me queréis decir que Julito legalmente no existe, que es un fantasma?

-Tengo padre y madre, bautizado e hice la comunión... Toma mi acta de bautismo, ah, y la de confirmación.

-... La ministra es roja, Julito, Mari Pili..., si la presentamos como única fe de existencia el recordatorio de la primera comunión de Julito tal vez la sirva para un guión de película de terror pero no para darnos una subvención.

-Sí, sí, claro, por eso hemos puesto la fotocopia de tu DNI falsificado, Lola.

-Mari Pili sabes que mi DNI es más falso que yo.

-¿No eres legal, Lola?

-Más que mi estampa, pero o eres un travestí, Julito o no cuela.

-Centrémonos… Mirad aquí tengo la factura del bote de tomate de año pasado, la de las lechugas. Los langostinos congelados que compré hace cinco años… Ves, Lola, esto es más verdad que todo yo mismo. Nos dan la subvención, te lo digo yo… Ah, esta factura es de la farmacia.

-Ay mi niño,¿cuándo enfermaste?

-No enfermo, famélico, pero sano, Lola. Es una factura de preservativos de mi vecino, me la ha prestado.

-¿Seis mil euros en preservativos? Eso no es un vecino, hijo, es pisha brava. Esto no lo podemos poner.

-¿Cómo que no, Lola? Mi primo tuvo que rodar varias películas porno y supuso mucho desgaste. Julito mete esa factura… Ah, mete ésta también.

-¿De qué es, Mari Pili?

-El colofón, Lola, con esta factura rematamos, nos dan la subvención y dejamos de pagar cafés a Julito.

-…Pero si es de la funeraria de Pepe. Se la habéis robado.

-No, no confundas, Lola. Hemos tomado prestado una partida de caja de muertos para cojos.

-¿Eh?

-Sí, Lola, mi primo rodó una película de caza de brujas.

-¿Se quedaron cojas, Mari Pili?

-No, Lola. Fue Pepe pensando en los cojos realizó en marquetería fina unas bellísimas cajitas cojas. Vamos, un tributo a los cojos… No entiendo cómo no he sido guionista de cine, Magui Pili Fernández rodeada de goyas por mi saga “Los cojos también mueren”

-Prima Mari Pili, Lola se ha desmayado…

-No me extraña, primo, no me extraña.

sábado, 8 de mayo de 2010

LOLA, AGENCIA DE TRABAJO

-Pepe, soy Lola. ¿Puedo pasar?

-Ya estás dentro Lola. ¿Qué quieres?

-Vengo a hacerte la vida más fácil.

-Entonces, Lola, vete por donde has venido.

-Mari Pili ven que el triste se me revela.

-Hola, Pepe. Qué alegría verte.

-Mari Pili no me seas falsa. Eres peor que Judas.

-Pepe que sepas que siempre te defiendo aunque seas más triste que un esqueleto, pero esta vez Lola ha tenido una idea brillante que te puede proporcionar un pozo de gozos.

-¿Un pozo de qué?

-… De penas, orgasmos…, depende Pepe, cada momento es un momento irrepetible querido triste.

-Pepe, necesitas un ayudante, necesitas escuchar a tu conciencia…, la sociedad necesita un parado menos.

-Tú no, Lola, tú no, que me entra el nervio. No te quiero aquí metida, vete al mercadillo… ¿No ves que si vienes los muertos no se mueren y se me acaba el negocio?

-Traaaanqui tronco, que ni de coña quiero currar contigo, ni morirme, ni que me entierres ni siquiera traficar con muertos.

-Bien, me dejas más tranquilo. Ahora iros, adiós, Mari Pili, Lola…

-Mari Pili cantemos “¡no, no, no nos moverán! no, no nos moverán! como un árbol firme junto al río no nos moverán”… Julito ven… Pepe te presento a Julito. Julito, te presento a Pepe.

-Buenas, Don Pepe…

-Buenas… Lola, ¿de dónde has sacado a este salpimentado?

-Ojo, Pepe, con lo que dices. Es mi primo y por tanto un Fernández, de la saga de…

-Tranquila, Mari Pili, déjame a mí que domo yo a la fiera... Pepe te traigo la horma de tu zapato. Canta, recita poemas...

-Mi trabajo, Lola, es enterrar. ¿Para qué quiero un cantante que fluye poesía?

-Necesitas un trovador para que el muerto se vaya más contento… Eso sí, hay que darle de comer. Está flojo y con un aire se te cae al hoyo y el bollo se te queda cojo.

-¿Don Pepe dan café con magdalenas en este santo sacro lugar?

-Julito calla. No empecemos la casa por las contraventanas.

-De eso nada- Hay que saber qué sueldo se le va a pagar a mi primo. Un Fernández no trabaja por nada.

-Julio, ¿qué sabes hacer?

-Nada, Don Pepe, pero tengo muy buena voluntad.

-Muy bien, Julito, muy bien… Pero mírale Pepe, está enterito, no ha currado en su vida. Conserva la energía virgen sólo y exclusivamente para ti. Y encontrar vírgenes en los tiempos que corren…, es costoso.

-Lola, hacedme un favor… Iiiiiiiiiiiiiiros los tres de aquí.

-A cantar chicos unidos en la lucha, no nos moverán, unidos en la lucha, no nos moverán” Pero pepe no me seas rancio, mira al chico con cariño. Si hasta tiene un puntito canalla muy gracioso.

-Lola, ¿dime para qué quiero un puntito canalla en una funeraria?

-Muy sencillo, Pepe, sencillísimo. Imagínate que viene una viuda inconsolable que no tiene consuelo. ¿Qué haces con ella? Tú la pondrías una silla al lado del muerto para que llore cómodamente. No, Pepe, no. Los tiempos cambian. Las viudas hoy necesitan consoladores y ahí entra Julito. Qué labia, qué porte, qué, qué, qué destrozo de hombre… Además la viuda bien consolada recomendará tu funeraria a otras viudas. Ya sabes, el boca a boca del marketing… ¿Qué, Pepe, cerramos el negocio?

-Largaros, largaros ahora mismo de aquí. Esto es un sitio serio.

-Tan triste como tú, Pepe… Chicos, a cantar… unidos en la huelga, no, no, no nos moverán! unidos en la huelga, no, no, no nos moverán! como un árbol firme junto al río no nos moverán, no nos moveráaaaaaan!


jueves, 6 de mayo de 2010

LOLA, MUJER ESPÍA

-Lola, ¿qué estás haciendo?
-Caaaaaalla, que se va a enterar Peluche.
-¿Pero tu crees que es normal lo que haces?
-Pues no, pero es el único procedimiento que me sé.
-Lola como salga y te encuentre, te la va a armar parda.
-Que te calles, Pepe…
-Al menos, dime que está pasando, Lola.
-Y yo qué sé. Si es que no te callas, eres peor que Chavez, leñe.
-Lola, el niño está suspirando, ¿no?
-Yo creo que llora.
-¿Quién llora?
-Vamos a ver, Pepe, ¿a quién estamos espiando?
-Yo a nadie, Lola.
-Pues lárgate y déjame.
-¿Me lo contarás luego, Lola?
-¿El qué, Pepe?
-Lo que está pasando. Oye, oye, oye…
-¿Qué oigo, Pepe?
-Parecía que estaba rebuznando, ¿no?
-Tú sí que rebuznas, Pepe. Ha dicho que sí.
-Que sí, ¿qué?
-No sé más. Como no te callas…
-Quita, Lola, yo tengo el oído mejor. Déjame…
-¿Qué dice?
-Que a las tres.
-Que a las tres, ¿qué?
-Ahora dice que es una cerdada…
-Te lo dije, Pepe. El niño rebuzna.
-Eso lo dije yo, Lola. Calla, calla, que ahora dice que no.
-¿Qué no? ¿Estás seguro, Pepe? Es que antes dijo que sí.
-Oye, Lola…
-¿Qué?
-¿De qué nos tenemos que enterar?
-Que te calles… Acaba de decir que pistacho.
-¿Nos tenemos que enterar de los pistachos que come? ¿No está a régimen? Los pistachos tienen muchas calorías, se lo debías prohibir, Lola.
-Pepe, ¿te callas?
-… Ahora dice que cuarenta y ocho.
-¿Seguro?
-No, porque dice que mejor cincuenta… Con cincuenta pistachos, le dolerá luego la tripa, ya verás…
-Vamos a ver Pepe, ¿Tú crees que me importa si come o no pistachos? Piensa un poco. Yo no me la juego por semejante tontería. Caaaaaaaalla, que dice que ya está.
-¿Qué ya está el qué? Pues si no te importa la salud del niño, no sé lo que te va a importar. Eres peor que una portera.
-Pepe lárgate.
-No, tengo que saber lo que le está pasando a mi hijo.
-Y yo soy la portera… Oye, ¿por qué no se lo preguntas en vez de estar estilo perro y a oscuras?
-Porque siempre espero que mis hijos me cuenten sus cosas sin yo tener que hacer de espía como su madre.
-¿Qué te cuenten todo, dices? Pero, ¿de dónde, puñetas, te has caído, Pepe? Los años han hecho demasiada paráfrasis en tu persona.
-¿Paráfrasis? Así que crees que soy una versión didáctica y clara… No sabía que tuvieras ese concepto tan bueno de mí, Lola. Gracias.
-De nada, Pepe. Pero los hijos no cuentan casi nada. Son expertos en telegramas. Caaaaaaaaaalla, lo acaba de decir, por fin…
-¿Sí? ¿Segura?
Síiiiiiiiiiiii, Pepe. Jó, qué apuro
-Algo me he perdido, ¿qué es, qué ha sido, Lola?
-Pepe…
-¿Qué, Lola?
-¡Felicidades!
-Ah, gracias, creí que no lo ibas a hacer… Oye, Lola…
-Dime, Pepe.
-¿Qué estabas espiando a Peluche?
-Pepe, no sabía si hoy era o no tu cumpleaños, ya sabes cómo tengo la memoria últimamente y no se lo iba a preguntar a Peluche. Se enteraría que su madre no tiene lo que debe tener.
-Tranquila, Lola. El chico lo sabe.
-¿Qué sabe?
-Que su madre está como un cencerro.
-Calla, que vuelve a hablar…
-¿Qué pasa ahora? Lola, quizá hoy no sea mi cumpleaños. Mira a ver…
-Que te caaaaaaaaaaalles, no oigo.
-Quita, que me pongo yo…
-Papá, Mamá, ¿qué hacéis ahí?
-Ah, hola, Anticristo… Por casualidad, ¿has visto el DNI de tu padre? Se le ha caído y no lo encontramos.

martes, 4 de mayo de 2010

LOLA EN FARMVILLE

-Tengo los sesos vacíos. Yo, no sé si llorar o qué hacer. Qué estrés, ni Pepe me estresa tanto. ¿Pero dónde está la diversión de la “FarmVille” de las narices, Mari Pili? Me levanto a media noche a ver si me han crecido las pechugas y los trigales.

-¿Qué es lo que te estresa, Lola?... Lola, ¿has plantado pechugas?

-Lechugas, coña, que ya hasta el lenguaje se me atrofia. Tengo que sacar leche a los toros, los conejos se me escapan. Las gallinas no me ponen huevos, corto el pelo a la tierra sin haberle crecido. Un desastre... Mira Mari Pili que llamo a Obama, eh.

-¿A Obama, Lola?

-No pretenderás que llame a nuestro presidente, Mari Pili, porque éste me termina de arruinar.

-…Sí, tienes razón. Yo desde que soy granjera estoy feliz. Amaso dinero y posesiones y se me olvidan los problemas.

-No sabes lo qué me alegro. Yo estoy amargada y como no tengo dinero en formato coins, bueno, ni en leuros, sólo puedo sembrar tomatillos que es lo más barato… ¿No ves qué cara tomatillo se me ha puesto?

-No sabes ser financiera y fertilizar tus cuentas, Lola.

-Será eso, Mari Pili de ahí que mi Pepe tenga la cuenta corriente bien fresca y más roja que un tomate. ¿Me puedes prestar un crédito a setenta barra/ ochenta años para plantar vacas y gallinas?

-Qué lenguaje, Lola... Te diré por única vez en nuestra historia en común que no te presto crédito ni coins, y que si no tienes para vacas, dedícate a ordeñar uvas.

-Pues si no me prestas crédito, préstame cinco euros, al menos, Mari Pili.

-¿Con cinco euros vas a comprar una vaca, Lola?

-No, Mari Pili, pero me tomo un cubata.

-Que sean diez euros, prima Mari Pili.

-Cállate Julito, cállate, que eres un esquirol. Me has dejado más tirada que una zanahoria en un parque de atracciones... Con la vaquería que tiene tu prima, tiene casas al por mayor, un globo, vacas que dan leche, un gallo-tritura-gallinas, de todo Julito. ¿Y yo? Ni un tractor amarillo ... Egoísta, Mari Pili. Así se te atragante todo un corral de pollos..., Julito, si hasta tiene cabras montesas tu prima.

-¿Cabras cómo ella, Lola?

-Más mejores que ella, Julito.

-Planta un viñedo, Lola.

-... ¿Julito tienes botellas vacías?

-Lola, ¿para qué quieres botellas?

-Ay, Mari Pili, aclárate. Me dices primero que plante un viñedo. Pues si me dices eso, tendré que tener botellas y enterrarlas en la tierra, ¿no?... Y luego recogeré el vino.

-¿De dónde?

-¿Te voy a enseñar ahora a ser granjera? Pues, hija, riego la tierra, a las botellas las crece las raíces y con el tiempo las sale vino.

-Lola dedícate al criadero de coliflores.

-Julito, no te he pedido tu opinión. Hago sólo lo que me dice tu prima.

-Já, y un cuerno, Lola.

-Te lo demuestro cuando quieras, Mari Pili, que tu palabra es ley para mí. Di...

-¿Y qué digo?

-Que me vas a dar leuros para mi granja.

-Pues no. Vete al banco España.

-Ya fui, pero está cerrado por defunción.

-¿Quién se ha muerto?

-Se ha muerto el dinero… Ay, os dejo.

-¿Dónde vas, Lola?

-A avisar a Pepe… Será un funeral de estado y vendrá Obama. Le diré que me fíe para mi granja.

-Lola, no se te olvide ponerte pamela.

domingo, 2 de mayo de 2010

LOLA, UNA CHICA YEYE

- “Arriba, parias de la Tierra! ¡En pie, famélica legión! Atruena la razón en marcha: es el fin de la opresión”
-Juliiiiiiiiiiiito, ¿Pero qué cantas?
-Es uno de mayo, Lola. El sindicato me necesita.
-Ah… ¿es la versión tecno de la Internacional?
-Sí, Lola, renovarse o morir.
-“Cara al sol con la camisa nueva que tú bordaste en rojo ayer”
-Mari Pili sabes que no me gusta coser, no me hagas esta putada…
-Lola estoy cantandoy se me está tostando la cara al sol, me estoy poniendo rebonita. Me voy con la Falange ¡Adiós!
-¡Hala! Mis amigos a tomar café, ¿y yo? Ni rebonita ni ná... Juliiiiiiiiiiiiito, espera…
-“Agrupémonos todos, en la lucha final. El género humano es la internacional”… Dime, Lola.
-Oye que digo que hoy es el día de la madre, que lo del trabajador se usó ayer.
-Ya, pero es que no me acordé ayer y lo celebro hoy. Los cineastas tenemos personalidad propia.
-¿Qué dices? ¿Te ha salido trabajo de acomodador de cines?
-No, Lola, me he metido a cineasta… “Del pasado hay que
hacer añicos”
-Ah… ¿No quieres tener memoria histórica, hijo? Qué lastima, qué pena, qué destrozo, estos muchachos están fatal.
-Lola, me siento falangista, ¿te vienes?… “Volverán banderas victoriosas al paso alegre de la paz”
-Me alegro Mari Pili, pero no voy, no me sé la letra y no tengo hueco en la cabeza para aprendérmela… Yo Hoy me he levantado con sensación de cargador de muelles. Mira, mira qué brazos más cachalotes tengo.
-Lola vente con los sindicatos.
-¿Qué me dan Julito?
-Orgullo de raza, Lola.
-Me sobra orgullo, Julito… Os espero en el parque… “No te quieres enterar, ye ye que te quiero de verdad, ye,ye,ye,ye”
-Señora, qué ritmo tiene usted.
-¿A qué sí señor guardia? Y sin necesidad de polarizarme … “y vendrás como siempre a suplicarme, que sea tu chica ye,ye que sea tu chica yeyeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee”