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Mari
Pili, la vida es un frenesí, pero tú vas como un caballo desfrenizado.
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Mira
quién habla, la que se acaba de comer una cazuela enteeeeeera de espaguetis.
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Mari
Pili no me seas flower power,
como humana que soy yerro, ahí está mi grandeza.
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¿Grandeza
comerse un perolo de pasta? No me amueles, anda. Por cierto, qué es eso que me
has llamado…
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¿Cuál
de todo? Porque me inspiras de todo menos chöwa… ¡Ah! Ya me acuerdo. Flower power
-
Eso,
eso, ¿qué significa?
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Ni
idea, pero rima… Bueno, como te iba diciendo, flower power, debíamos tú yo practicar el chöwa para
inspirar a nuestro entorno más cercano
paz y armonía.
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Mira, flower power,
alias Lola, déjame de cosas raras y chöwas y los gilipolllas que fundaron el
fundamentalismo chöwa. Yo, Mari Pili Fernández, de los Fernández de toda la
vida, soy normal y quiero seguir siendo normal, ¿entendido, Lola?
-
¿No te digo? Como un
caballo desbocado y, encima, queriendo ser masa, flower power, alias
Fernández. Ser normal, lo hace cualquiera, de ahí que haya tal cantidad de
normales, que pasan a ser masa. Además,
¿tú sabes que la masa engorda? En cambio, un ser chöwa, es la leche, la
releche, Mari Pili. Sirve para mejorar
nuestras relaciones sentimentales y de amistad, ayuda a recuperar el equilibrio
físico, mental y espiritual. El chöwano transmite paciencia y comprensión, el chöwano es la hostia Mari
Pili…
-
¡Lola,
por Dios! Deja de decir sandeces, parece que te has fumado un canuto, hija.
Mira, es mejor ser flower power las dos. No somos masa, pero tampoco de los
excéntricos esos… ¿Se llamaban chöwanos o anos, Lola?
-
¡Inculta!
No mezcles culos con chöwa… ¡Ah! Importantísimo, Mari Pili. “No
debemos olvidar la importancia del vestuario a la hora de encontrar el equilibrio. Por ello es fundamental
vestirnos en armonía con nuestro estado de ánimo, las estaciones del año y las
circunstancias, eligiendo ropa confortable y con colores en armonía con el
momento”… ¿Me sigues flower power?
-
¿Qué
si te sigo, Lola? A pies juntillas, hija. Ya ves lo normales y armónicas que
nos vestimos que hemos ido al chino a por los disfraces de carnaval, y los
llevamos puestos para que no se arruguen… Una de sapo, y la otra de rana.
Calentitas y armónicas con la estación.
-
Mari
Pili, te recuerdo el orden y la limpieza. Fundamental, recuérdalo.
-
¡Eh!
Para… Lola, acaso, ¿me estás llamando guarra, guarrilla o cerda directamente?
Eso sí que no te lo consiento. A limpia y ordenada no hay un solo ser en spain,
ni en las islas de Ibiza y Formentera que me supere. ¿Me has escuchado bien
Lola?
-
Perfectamente
Mari Pili. Por cierto, has nombrado Ibiza y allí vive mi amiga Marisa. La voy a
llamar para que deje de limpiar. Limpiar por limpiar pa na, es tontería. Ya lo
comento que va la más relimpia de spain y aledaños, y limpia su casa.
-
Lola,
de verdad, no te soporto, ¡Cuánto entiendo a Pepe!
-
Flower
power, respira hondo. Yo comprendo que mi intensidad es inmensa, pero gracias a
estar convirtiéndome chöwana, comprendo, respeto, las opiniones contradictorias
a la inmensidad de mi ser inmenso… Te perdono, Mari Pili.
-
¿Eh?
Lola, hazme un favor…
-
Dime,
pide y se te dará, flower power.
-
Vete,
interiorízalo, Lola, vete a tomar por culo… ¡Adiós!
M
Ángeles Cantalapiedra, escritora
©Largas tardes de azul ©Al otro lado del tiempo ©Mujeres descosidas ©Sevilla...Gymnopédies
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