jueves, 8 de mayo de 2014

LOLA EN CONFESIÓN

-Ave María Purísima…
-Sin pecado concebida… Dime hija de qué te acusas…
-De tanto, Páter… El caso que según lo mires porque si lo miras transversal termino rápido. Ahora bien, mirado de frente sin cerrar los ojos, la leche, Páter, la leche.
-¿Quién eres, hija?
-Soy Lola, Páter, no tema, el demonio le he mandado a freír moñigos para que no nos interrumpa.
-Lola lárgate ahora mismo de mi confesionario, no tengo tiempo para ti… ¿Qué hora es?
-Las once menos cinco, Páter… Para que vea lo generosa que soy que no cobro por decirle la hora.
-Lola es que has venido a las nueve y media… ¿En hora y media te ha dado tiempo a pecar?
-Yo no quería, Páter, ha sido mi Pepe.
-Hija mía, fornicar con tu marido no es pecado.
-Qué va, Páter, que ya no fornicamos, la cosa de la próstata ha dejado chunguito al canario.
-¿Entonces, Lola, has vuelto a robar en la frutería limones, zanahorias, guisantes, peras…?
-Agua, Páter, agua, no ha dado ni una… Pepe está abducido y quiere convertirme en asesina, fíjese usted con lo pía y Mari pía que soy… Imposible, vamos que prefiero matar antes a una manzana, Páter.
-Comerse una manzana, Lola, no es un crimen sino un acto sano. Lo que te pierde a ti, Lola es que vuelves loca a María Santísima.
-Páter, Páter, vamos a llevarnos bien, ¿vale? No meta a María que es muy santa en esta sopa de pescado.
-¿Es que vas a hacer sopa de pescado, Lola? Te sale muy buena, tráeme las sobras, harás conmigo una obra de caridad.
-¿Usted, también, quiere que peque? Quéeee vergüenza, Quéeee desfachatez, la iglesia con curas como usted más la vale que cierre el chiringuito porque vamos de cabeza todos al infierno… Menos mal que usted no me cae mal del todo con lo que no me chivaré al Papa Francisco, pero Páter, por Dios y todos los santos que me induzca usted al asesinato es muy fuerte, eh, muy fuerte… Ahora, a Mari Pili que la he traído de las orejas a confesarse no se la presto ni de coña, Páter, ni de coña. Mi Mari Pili es sagrada y usted un depravado.
-Lola lárgate ahora mismo pero antes de que te vayas, has de saber que hacer una buena sopa de pescado es sublime.
-Pero Páter, ¿sabe con qué se hace la sopa de pescado? Se lo voy a decir yo: con pececillos de Dios, Páter, almas para evangelizar no asesinar.
-Los peces están para comérselos, Lola, no para evangelizar. Poco has leído tú los evangelios.

-Tiene razón, Páter, prefiero leer a Corín Tellado, pero sí me sé los diez mandamientos y el séptimo o el noveno, no sé, dice “no matarás a tu prójimo”, y mi Pepe, Páter me trae todos los peces que pesca, yo les salvo metiéndoles en la bañera y Páter, éeeeel se los quiere comer y me manda que los mate… Y un cuerno, que se los coma crudos si quiere, ¿no lo hacen los japoneses? Pues los españoles no vamos a ser menos, ¿no le parece, Páter?

2 comentarios:

Juanjo dijo...

Que bello que escribes
que bella que eres

Noris Marcia dijo...

Me ha gustado tu blog, precioso! Un saludo primero desde E.U.